El primer descobriment de Gaia: sorprenent escombraries espacials

Enllaç original: New Scientist

El primer descubrimiento de Gaia fue sobrevivir la embestida de basura espacial inesperada.

Los científicos trabajando con el satélite Gaia de  la Agencia Espacial Europea han encontrado que la nave esta siendo acribillada  por muchos más micrometeoritos – pequeñas motas de polvo espacial – de los que se habían previsto. Los golpes no ponen en riesgo a Gaia, aunque los científicos de la misión tendrán que vigilarlos de cerca para que no interfiera con las observaciones científicas. Y este descubrimiento puede traer problemas para futuras misiones espaciales que van a la misma posición orbital.

Lanzado en diciembre de 2013, la misión Gaia esta preparando un mapa de mil millones de estrellas en nuestra galaxiaMovie Camera con una gran precisión. Este mapa ayudará a los astrónomos a entender mejor la estructura y evolución de nuestra galaxia. Gaia ya ha tenido algunos sustos técnicos, como el hielo en sus espejos que ha ido desapareciendo, y el exceso de luz solar colándose a pesar del parasol. Para ajustarse a estos inconvenientes, el equipo Gaia ha retrasado la primera publicación de datos científicos nueve meses.

Punto conflictivo

La solución de problemas en el satélite Gaia es una hazaña dado que el satélite se encuentra a 1.5 millones de kilómetros de la Tierra, en el punto Lagrangiano L2. Esta es una posición donde la combinación de las fuerzas de gravedad de la Tierra y el Sol, permiten que un satélite se mantenga alrededor de un punto fijo en la parte opuesta al Sol de nuestro planeta.

Unos cuantos satélites ya han hecho el viaje a L2 sin notar estos altos niveles de micrometeoritos. En cualquier caso, en base a los datos sobre polvo espacial alrededor de la Tierra, los astrónomos habían esperado que una cantidad modesta de este polvo golpearía regularmente Gaia.

Para realizar estas medidas, el equipo necesita conocer con una precisión sin precedentes la dirección a la que esta apuntando el satélite, lo que significa que Gaia es extremadamente sensible a cambios extremadamente pequeños en su velocidad de rotación. La detección de estos cambios ha revelado el sorprendente número de golpes de micrometeoritos.

“Una primera aproximación era esperar entre uno y diez por día,” dice Floor van Leeuwen, astrónomo del Instituto de Astronomía en Cambridge (Reino Unido). “Estamos observando al menos unos 500 al día.” El equipo piensa que muchas de las partículas de polvo están golpeando el parasol, aunque el origen de los micrometeoritos no está aún claro.

Restos planetarios

“Existe la sugerencia de que un anillo de polvo rodea a los planetas como la Tierra o Venus, mas o menos siguiendo las posiciones de los puntos Lagrangianos”, dice van Leeuwen. Y Nigel Hambly, un científico de Gaia basado en la Universidad de Edinburgo (Reino Unido), sospecha que el polvo es material de desecho de la formación de lunas y planetas.

El descubrimiento de los micrometeoritos es de particular interés para los científicos trabajando en el telescopio James Webb Space Telescope (JWST) de la NASA. Este observatorio en infrarrojo se dirigirá a L2 en 2018 para estudiar un abundante conjunto de misterios cósmicos, y los impactos de micrometeoritos tienen el potencial de disminuir la reflectividad de los enormes espejos del telescopio sin protección.

El científico del JWST Mark Clampin del Goddard Space Flight Center en Greenbelt, Maryland, nos cuenta que el y sus colegas han estado hablando con el equipo de Gaia y evaluarán ahora si estos descubrimientos difieren de sus predicciones sobre lo esperable en L2.

“JWST utiliza actualmente un modelo de la NASA para el ambiente de L2, que incluye micrometeoritos, y es necesario comparar los resultados de Gaia con este modelo,” afirma